Ya estamos en otoño y no está de mas el empezar a pensar en proteger sobre todo las especies delicadas de las heladas . Dos de las épocas más importantes para el abonado de los bonsáis son la primavera y el otoño con ellas vamos a asegurarnos una buena brotación y una acumulación de reservas para el año siguiente. La época de abonado cubre la época de actividad vegetativa, normalmente de marzo a octubre, con un parón en la época de mas calor, Julio y Agosto en mi caso, y hasta la llegada del frío en Diciembre- Enero donde haremos otro parón. Algo importante a la hora de abonar es informarse de los requerimientos de la especie en concreto, no todas las especies requieren lo mismo, también tiene influencia la localización de los mismos, la iluminación, el tipo de sustrato, frecuencia de riegos, si el bonsái es joven y está en formación, si ya esta hecho etc...
Cualquier planta en su hábitat natural tiene a su disposición todos los nutrientes que necesita, no ocurre lo mismo en las plantas cuando las tenemos en una maceta, los nutrientes contenidos en los diferentes sustratos no son suficientes por si mismos para satisfacer todas las necesidades de las plantas o se van agotando. Esto es más crítico en los bonsáis debido a las constantes “judíadas” que les hacemos (trasplante, podas, alambrados, poda de raíces etc.) esto supone un gasto de energía considerable que el bonsái solo puede recuperar en parte del sustrato en que vive o en el caso de sustratos inertes no tienen forma de recuperarlo, es por lo tanto vital aportar mediante abonado todos los nutrientes necesarios para la vida vegetal.
Excepto en casos de una deficiencia especifica los tres nutrientes que más nos interesan a la hora de abonar las plantas en general y en este caso los bonsáis, son los conocidos N,P y K además del hierro en las plantas calcífugas debido a su incapacidad de obtener el hierro y otros oligoelementos en suelos calizos( alcalinos).
Bien, sabemos que el N es de especial importancia para un crecimiento rápido, un buen color verde y abundancia de hojas, frutos y semillas. El P participa en todos los procesos de las plantas y es de vital importancia para el desarrollo de las raíces, acelera la floración y el desarrollo de nuevos brotes y después tenemos el K que aparte de ayudar a que el bonsái genere sus propias reservas, colaborar en el desarrollo de nuevos brotes y floración favorece el endurecimiento de los tejidos vegetales (lignificación) y estimula su resistencia a las enfermedades.
Tipos de abono
Para no liarlo mucho los podemos clasificar en orgánicos e inorgánicos, también podemos encontrar marcas que son mezcla de ambos. Los orgánicos por lo general son residuos de animales o plantas y suelen incluir también harinas de huesos etc. Estos suelen ser de acción lenta pera duradera y los inorgánicos que proceden de fuentes minerales o artificiales se disuelven por lo general fácilmente y son de acción rápida. Dentro de estos existen también los abonos líquidos para emplear disueltos con el agua de riego y otros fertilizantes de lenta liberación que depositamos en el sustrato y se van disolviendo con los riegos o el agua de lluvia y suelen durar meses. También existen abonos correctores que nos sirven para los casos en que se detecta una carencia de un nutriente en concreto
Bueno, vayamos al grano, yo en esta época utilizo un abono de liberación lenta pobre en nitrógeno o preferentemente sin el. El contenido de nutrientes en este abono suele venir indicado en el envase en términos de porcentaje, bien por ejemplo 15% de N 10% de P ó 10% de K, o simplemente 15:10:10 lo que nos está diciendo en este caso que cada 100 gr de este abono 15gr son de N 10 gr de P y 10 gr de K., yo con las especies que mantengo utilizo un abono 0:10:10 ya que en esta época lo que menos nos interesa es fomentar el crecimiento del árbol y si potenciar las raíces , que la madera vaya endureciendo y potenciar la acumulación de nutrientes y al llegar la época de mayor actividad del bonsái, en primavera, cambio a un abono 10:10:10, hay aficionados que utilizan abonos con menos cantidad de N, 5:10:10 o incluso menos, yo sin embargo prefiero abonos mas equilibrados también suelo intercalar algún abonado con fertilizante líquido rico en oligoelementos (los famosos micros) para prevenir posibles carencias. No debemos olvidarnos de lo pretendemos del bonsái, por ejemplo que crezca, le vamos a trasplantar este año, podar, etc.,
Podemos reforzar ese trabajo utilizando abonos de distintas proporciones en función de los nutrientes teniendo en cuenta lo dicho anteriormente, por ejemplo si vamos a trasplantar nos interesa abonar 1 mes antes con abonos ricos en P para facilitar el enraizamiento posterior.
Conviene recordar que no debemos abonar en los siguientes casos:
- Recién trasplantado
- Arboles caducos sin hojas (hay que recordar que todo el proceso de respiración vegetal empieza en las hojas y lo único que haríamos es acumular demasiados nutrientes en el sustrato)
- En épocas de mucho calor o frío
Y así es como abono yo, no quiere decir que sea la mejor forma, pero me funciona, desde aquí os animo a que posteéis con vuestras experiencias .
Bibliografia Guía práctica ilustrada para El Jardin tomo 1 pag 158-159 Editorial Blume Autor Michael Wright
El cultivo del Bonsai Editorial Susaeta Herminia Bevia/Antonio Resines
http://es.wikipedia.org/wiki/Abonado
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